Si hay un lugar que captura la esencia del otoño en Bélgica, ese es Tervuren. A pocos minutos de Bruselas, este tranquilo pueblo alberga un parque majestuoso y una naturaleza que, año tras año, nos invita a volver. Para nosotros, Tervuren es más que un destino; es un refugio personal, un espacio que nos conecta con la naturaleza y entre nosotros.

El comienzo de nuestra historia en Tervuren
La primera vez que visité Tervuren fue hace 7 años, durante mi primera estancia en Bélgica. Recuerdo perfectamente el día: estaba de visita con algunos amigos y, al entrar en el parque, quedé completamente cautivado. Los colores del otoño —una mezcla de verdes, naranjas, rojos y dorados— contrastaban con el cielo gris, y me sentí instantáneamente enamorado de este lugar. Era la primera vez que veía el otoño de esta manera, tan vivo y lleno de matices, y desde ese momento, supe que volvería.


A lo largo de los años, este rincón especial se ha convertido en una tradición para nosotros. Ahora, cada otoño, Natkin y yo volvemos a Tervuren para caminar por sus senderos, disfrutar del aire fresco y, simplemente, reconectarnos. Es un momento que esperamos con ansias, una escapada de la rutina y el caos de la vida diaria en Bruselas.
El Parque de Tervuren: Un espectáculo de otoño
El Parque de Tervuren es el corazón de esta experiencia. Al adentrarnos por sus senderos cada año, sentimos cómo el tiempo se desacelera. El sonido de las hojas bajo nuestros pies, el aire fresco del otoño y el paisaje cambiante hacen que cada paseo sea único. Los colores del follaje nos sorprenden cada vez, incluso después de tantos años.
Uno de nuestros puntos favoritos es la Capilla de San Huberto, un rincón que parece sacado de un cuento. Allí solemos hacer una pausa, respirar profundamente y simplemente disfrutar del silencio. Otro lugar especial es el Spaans Huis, un edificio histórico que nos transporta a otra época mientras observamos el reflejo del cielo en el estanque cercano.
El Arboretum Geográfico: Un viaje botánico en otoño
El Arboretum Geográfico de Tervuren es otro de los tesoros que ofrece este lugar. Para quienes disfrutan de la naturaleza, es un destino imprescindible. Este vasto espacio alberga más de 700 especies de árboles de todo el mundo, lo que lo convierte en un lugar perfecto para los amantes de la botánica.
Aprovechamos y nos hacemos muchas fotos, por su puesto Natkin es siempre mi modelo. Pocas veces el toma la camara y soy yo entonces el fotografiado.




En otoño, el arboretum se transforma en un mosaico de colores. Las hayas doradas, los robles rojizos y los pinos imponentes crean un paisaje espectacular. Caminamos entre estos gigantes, sintiendo que cada paso es una nueva experiencia.
Zoniënwoud: Un sendero entre gigantes
Uno de los puntos culminantes de cada visita es el Zoniënwoud.
El Zoniënwoud, también conocido como el Bosque de Soignes, es un vasto y antiguo bosque que se extiende a las afueras de Bruselas, ofreciendo un refugio natural lleno de biodiversidad. En otoño, el bosque se convierte en un espectáculo visual con su dosel de hayas y robles dorados, pero lo que realmente lo hace especial es la oportunidad de encontrarse con la fauna local, como el petirrojo europeo (Erithacus rubecula).

Logramos fotografiar muy de cerca a este pequeño pájarito, con su característico pecho rojo, es un habitante territorial del Zoniënwoud. A pesar de su tamaño, el petirrojo es feroz a la hora de defender su territorio, usando su canto y lenguaje corporal para evitar disputas. Los juveniles, sin embargo, no muestran el pecho rojo hasta semanas después de dejar el nido, lo que les permite evitar ser atacados por sus propios padres. Además de ser un emblema del bosque, los petirrojos tienen una dieta variada que incluye gusanos, semillas, frutos y pequeños invertebrados.
El Zoniënwoud ofrece una experiencia inmersiva en la naturaleza, donde cada paseo puede ser una oportunidad para ver aves, como el petirrojo, en su hábitat natural. Con sus majestuosos árboles y su vibrante vida silvestre, este bosque es el lugar perfecto para los amantes del senderismo y la observación de fauna.
Sabores de Tervuren: Un final delicioso para un día perfecto
Después de pasar el día caminando, no hay mejor manera de terminar nuestra visita que disfrutando de la gastronomía local. En Tervuren hay varios restaurantes acogedores que ofrecen platos belgas tradicionales, perfectos para recargar energías después de una jornada de exploración.
Nuestro ritual incluye siempre una parada en una de estas terrazas, donde disfrutamos de una cerveza local o un café, mientras observamos cómo cae la tarde. Es un momento de relajación y reflexión, donde hablamos sobre lo que nos ha dejado este día y lo que nos espera en nuestras próximas visitas.
Cómo llegar a Tervuren: La escapada perfecta desde Bruselas
Llegar a Tervuren desde Bruselas es muy sencillo. El tranvía 44 te lleva directamente desde Montgomery hasta el corazón de Tervuren, pasando por paisajes tranquilos que ya te preparan para la experiencia que te espera. Para aquellos que prefieren ir en coche, el aparcamiento en la zona es accesible y cómodo, especialmente si planeas quedarte más tiempo.
Un destino otoñal que siempre sorprende
Tervuren es mucho más que un parque bonito o un destino turístico. Para nosotros, es un lugar lleno de recuerdos, de momentos compartidos y de una belleza natural que nunca deja de sorprendernos. Ya sea que estés buscando un lugar para desconectar, una oportunidad para conectarte con la naturaleza o simplemente disfrutar de un paseo tranquilo, Tervuren en otoño te ofrece todo eso y más.
Así que, si estás en Bruselas durante esta temporada, no lo dudes. Toma tu abrigo, tus zapatos cómodos y ven a descubrir la magia de Tervuren. Te aseguramos que, como nosotros, te enamorarás de este rincón de Bélgica y harás de él una tradición personal.
Consejos Prácticos para tu Visita al Zoniënwoud
🐕🦺 Lleva siempre a tu perro con correa: Es obligatorio y ayuda a proteger la fauna y a otros visitantes.
🚶♂️ Respeta los caminos señalizados: Hay suficientes rutas para explorar sin necesidad de crear nuevos senderos. No te salgas de los caminos existentes.
🚴♂️ Ciclistas, cuidado con los peatones: Mantente en los caminos designados y respeta la velocidad.
🧺 Cuidado con la basura: Llévate todos los residuos que traigas. Mantener el entorno limpio es responsabilidad de todos.
🌲 Cuidado con los niños: No permitas que arrastren ramas o madera por los senderos o prados, ya que esto puede causar accidentes o daños al equipo de mantenimiento.
Ensemble pour la forêt de Soignes ! Vous participez ?
Si planeas visitar el Zoniënwoud, aquí tienes algunos consejos prácticos para disfrutar de una experiencia relajada y respetuosa con el entorno:
- Accesos fáciles: Las puertas de acceso a la Forêt de Soignes son fácilmente accesibles, ¡aprovéchalo!
- Transporte público: Para llegar relajado, utiliza el tren, tranvía o el bus ‘de la forêt’. Es una manera cómoda y sostenible de visitar el bosque.
- En bicicleta: Si prefieres una opción más activa, llegar en bicicleta es rápido y agradable.
- Si vienes en coche: Te recomendamos utilizar los grandes Park & Ride para dejar tu coche y continuar el trayecto en transporte público. Así evitarás el estrés de buscar aparcamiento los fines de semana o en días soleados.
- Buenos gestos en la naturaleza: Durante tu visita, asegúrate de respetar las normas del bosque y cuidar el entorno natural.
Con estos sencillos gestos, ayudarás a preservar la belleza y tranquilidad de uno de los mayores tesoros naturales de Bélgica: el Zoniënwoud.